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20 dic. 2019
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Vietnam camufla la amenaza china en el sector textil de México con el TPP 11

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20 dic. 2019

Este 2019, ha sido un año difícil para la industria textil y de calzado en México, que ha tenido que navegar entre las incertidumbres de los nuevos tratados comerciales, la transformación y desaceleración de sus sectores y la llegada de un nuevo Gobierno a la presidencia del país. Entre la ratificación del Tratado Comercial de México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y la lucha constante contra sus enemigos históricos como lo son la subvaluación y la piratería, ambos sectores se enfrentan a una nueva amenaza: el Acuerdo Amplio y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTPP, por sus siglas en inglés), mejor conocido como TPP 11.


Archivo - EFE


El tratado, que entró en vigor el 30 de diciembre de 2018 y está conformado por 11 países de la cuenca del Pacífico, excluyendo Estados Unidos, le ha quitado el sueño a las cámaras de ambos sectores, pues contempla una reducción arancelaria con Malasia y Vietnam, que cuentan con mano de obra barata, al tiempo que permite a este último país asiático utilizar insumos de naciones de ese continente, como China, en textiles y prendas de vestir al considerar que hay escaso abastecimiento. 
 
Por lo anterior, los líderes del calzado y textil mexicano temen el cierre de empresas y la pérdida del 35 % de los empleos formales en los tres primeros años, así como un aumento en las importaciones con prácticas desleales. A casi un año de la entrada en vigor del TPP 11, FashionNetwork.com conversa con representantes de ambas industrias para conocer el estado actual de los sectores que representan, además de las propuestas para convertir a México en un país especialista de maquila a uno competitivo globalmente con valor agregado en sus productos.

 

Cartas paralelas: ¿el verdadero blindaje ante la competencia desleal asiática?


 
Antes de que Estados Unidos se saliera del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP), el tratado ya contaba con cartas paralelas (acuerdos bilaterales) para los sectores sensibles. De acuerdo con la Embajada de Vietnam, se armaron dos cartas paralelas (publicadas en el Diario Oficial de la Federación del 30 de noviembre) para el sector textil y confección. 
 
Sin embargo, tras no haber obtenido el apoyo prometido cuando el Senado mexicano ratificó el tratado el año pasado, industriales de la Cámara Nacional de la Industria Textil (Canaintex) y de la Cámara de la Industria del Calzado del Estado de Guanajuato (Ciceg) pidieron al actual Gobierno la firma de nuevas cartas paralelas en las que se impide a vietnamitas aplicar la cláusula de escaso abasto, por la cual se les deja utilizar insumos chinos para producir prendas y zapatos que exportarán a México. 
 
Sin embargo, para Raúl García Tapia, exdirector de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canaive), la realidad es que el mercado mexicano ya está inundado de productos asiáticos y las exigencias actuales para salvaguardar al sector vestido dentro del acuerdo poco cambiarán la realidad.
 
“Ya estamos invadidos de ropa de Vietnam o China, pues uno va a un centro comercial a una cadena como Forever 21 o H&M y esa ropa está hecha en esos países. Es trascendente o intrascendente si se firman o no cartas paralelas, o si se excluye al sector textil y de confección del TPP 11: eso no va a cambiar la realidad que ya existe en el país”, detalló Tapia, quien prevé para este año una caída del 3 % en la industria del vestido, incluyendo pérdidas de empleos.
 
Para Tapia, ahora director del evento Fashion Outlet WTC, firmar nuevos acuerdos no cambiará el potencial exportador mexicano, que actualmente concentra el 97 % de las ventas extranjeras de indumentaria en Estados Unidos.

 

Vietnam y la competencia desleal al calzado mexicano


Archivo - EFE


Tras la entrada en vigor del TPP 11, las importaciones de productos de Vietnam en México ascendieron a 1536 millones de dólares entre enero y abril de 2019 de acuerdo con datos del Banco de México (Banxico) y la Secretaría de Economía, en comparación con las exportaciones mexicanas por 63 millones de dólares. Esto representó un déficit de 1473 millones de dólares. 
 
El calzado que más se importó fue el deportivo, con más de 60 millones, según Banxico y la SE.
 
En este sentido, Luis Ernesto Rojas Ávila, director general de la Coordinadora de Fomento al Comercio Exterior (Cofoce) del estado de Guanajuato, aseguró a este medio que la comparación entre el producto mexicano y vietnamita o asiático no se debe hacer en términos de calidad, sino de competencia desleal.
 
“Es una farsa decir que el calzado asiático es de mala calidad, ya que puedes encontrar zapatos de gran calidad de hasta miles de dólares que se están exportando a nivel mundial. Sí, los zapatos, en su mayoría, son económicos y no están hechos de los mejores materiales, pues compiten por el precio. Pero más allá de un tema de calidad, que por supuesto lo que llega a México son productos sintéticos o calzado deportivo o líneas de calzado pegado, es que la competencia ha sido desleal, porque estas líneas u otros productos traen subsidios, costos ocultos, que obviamente no generan una competencia directa y que el arancel no lo compensa”, detalló.
 
“Hay que competir por ser diferentes, por tener un valor agregado, una marca propia, porque, a pesar de los aranceles y las medidas compensatorias dedicadas a parar esta competencia directa, siempre habrá empresas o gente que produzca a precios más bajos. Nosotros creemos firmemente en que la etapa de maquila de México ha culminado, estamos inclinados a esa diferenciación y tenemos numerosos casos de éxito de fabricantes que vendían su calzado en 20 dólares y hoy lo venden en 400 dólares”, aseguró Rojas Ávila.
 
De acuerdo con la Coordinadora, en 2018 Guanajuato exportó en calzado 264 millones de dólares de enero a septiembre, mientras que en 2019 se registran 252 millones de dólares. Aunque se ha observado una desaceleración en el número de pares tras proyectos masivos que se han cerrado, este año el estado logró un precio promedio récord por par exportado, con 36 dólares frente a los 33 dólares del año pasado, y 21 dólares a nivel nacional, tras un nuevo enfoque de mejorar sus márgenes de utilidad.
 
“Hay mercados donde sí puedes vender como Canadá, Australia, Japón, Singapur, Nueva Zelanda y ahora Chile, pero por otro lado está Vietnam, Malasia, Brunei, que compiten por costo. Es un tema de balance”, dijo el director de la Cofoce.

 

El Gobierno mexicano se enfoca en políticas públicas competitivas y la lucha contra la ilegalidad


 
Para proteger al sector textil ante el TPP 11, el Gobierno mexicano anunció a inicios de este año que negoció con Vietnam una desgravación arancelaria de largo plazo, de entre 10 y 16 años, y una regla de origen estricta para asegurar que la proveeduría se quedará en la región.
 
A su vez, para el calzado se estableció una desgravación de 10 a 13 años para el 78 % del arancel, al tiempo que mantenía una regla de origen muy estricta que respondía a los intereses y preocupaciones del sector nacional. Medidas que deben mejorar para proteger ambos sectores.
 
“Lo primero que tiene que hacer el Gobierno es blindar las aduanas. Lo segundo es un tema que no va a dejar de existir: que dejen de llamarle comercio informal al comercio ilegal. Si se sigue solapando a quienes venden ropa robada, de contrabando o fabricada en condiciones ilegales, es decir, en lugares donde no pagan luz, agua ni seguro social a sus trabajadores, seguirá existiendo la ilegalidad”, enfatizó.
 
Por su parte, Rojas Ávila coincide en que solo ser un país manufacturero ha generado pobreza y condiciones no aptas para los trabajadores en México por décadas. 
“El TPP 11 beneficia a ciertos sectores pero a los que son de mano de obra los deja en un estado muy difícil. Hay que abrir paulatinamente y crear políticas públicas que eleven su competitividad antes de dejarlos a la deriva, que es lo que ha ocurrido con el sector calzado y de moda que ha estado enfocado en un 80 % en la maquila de bajo costo (...) Las Cámaras, el Gobierno, el sector empresarial y el sector académico debemos trabajar alineadamente para elevar la competitividad del sector basado en la diferenciación y en la industria 4.0”, aseguró.

 

La transformación digital de la moda


 
Ante el proceso de desgravación arancelaria en el CPTPP, los sectores del textil, vestido, confección y calzado tienen como reto transformarse en la era digital con nuevos canales de comercialización, crear nuevas narrativas en las marcas, con una apuesta fuerte al diseño y a los nichos de mercado.
 
“Lo que necesitan los industriales es encontrar un nicho de mercado, hacer un trabajo de inteligencia comercial donde tengan posibilidades de destacar. Ahora China está muy inestable en cuanto a su comercio con Estados Unidos y hay una posibilidad de exportar más. No hay que ver el tema de exportación como una alternativa o plan B. Las compañías exitosas lo son porque están enfocadas a ese negocio, porque tienen una estructura y son profesionales”, declaró el exdirector de la Canaive. 
 
“Hoy no hay que competir por ser el más barato, sino por ser el más diferente. Uno de los grandes retos es ir cambiando la mentalidad de muchos de los representantes de esta industria de la maquila a pensar en vender con su propia marca, no llegar a los canales tradicionales, sino a nuevos, llegar al último consumidor, no un B2B sino un B2C, y obviamente aprovechando los beneficios de un mayor margen de utilidad y una experiencia de compra (...) Debemos dejar de preocuparnos por la defensa y empezar a ocuparnos en elevar nuestra competitividad. Sólo ésta nos va a llevar al siguiente nivel”, finalizó Rojas Ávila.
 

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