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22 dic. 2020
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Pierpaolo Piccioli comenta la nueva experiencia Re-signify Part One Shanghai de Valentino

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Hernandez Sebastian
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22 dic. 2020

La nueva experiencia de marca que presentó Valentino en Shanghái es lo más reciente en chic semiótico de la marca italiana.


Foto Valentino


“Valentino: Re-signify Part One Shanghai” es una exposición multidisciplinaria de fotografía, finas artes, video y moda en una exhibición diseñada como “una revisión de los signos y los códigos de maison Valentino”, según Pierpaolo Piccioli, director creativo de la marca romana.

Roland Barthes no lo podría haber dicho mejor.

“Se trata de mantener abiertos los códigos de la marca para el presente y ser relevantes para el hoy. Es más una experiencia que una exposición, que conecta los códigos de Valentino con el arte y el cine underground. Se trata de compartir una sensibilidad y no un estilo de vida”, explicó Piccioli a FashionNetwork.com en una llamada de Zoom desde Roma.

“Queríamos un proyecto abierto y el comienzo de una perspectiva diferente. Abrir nuestra casa a otro mundo. Comenzando con el nacimiento de la casa en 1960 hasta el primer vestido rojo de Valentino, y llegamos a los accesorios del taller, hasta la alfombra roja y la ropa de día”, agregó Piccioli.

Re-signify se llevará a cabo en la más reciente y popular institución de arte de la ciudad, Power Station of Art, escenario de la Bienal de Shanghái, del 19 de diciembre al 17 de enero. El espacio se divide en galerías, cámaras, una biblioteca, un club tipo mazmorra e incluso una sala de empatía (Empathy Room).

“Shanghái es una cultura muy lejana. Nuestro pasado es mucho menos conocido en China que en Europa y Estados Unidos, por lo que es genial presentar este concepto en Shanghái”, dijo el diseñador, explicando la elección de la ubicación.

Los aspectos más destacados incluyen la instalación de video COSPlayers de Cao Pei, donde los bohemios del cosplay artístico se encuentran con los Power Rangers; a las múltiples Polaroids de Robby Müller, reinventadas con retroproyecciones y a imágenes del centro neurálgico de la casa en Roma, el Palazzo Mignanelli.


Foto: Valentino


Mientras que la biblioteca contiene triangulaciones de los variados archivos de la casa, desde las visiones de Stanley Mouse Haight Ashbury y la fotografía gráfica de Sølve Sundsbø hasta las impresiones del fundador Valentino Garavani o la campaña Diary realizada por Piccioli.

Todo el camino hasta una céntrica Piazza, donde se proyecta un video filmado por Nick Knight de vestidos de Alta Costura hiperalargados de la colección otoño/invierno 2020, vistos por primera vez en un desfile físico y virtual en Cinecitta este verano. Los visitantes pudieron acercarse a los vestidos de gran escala por medio de andamios.

También hasta la mazmorra, repleta de tachuelas, el emblema que define a Valentino bajo el ala de Piccioli, y un encuentro de lo que él llama “una característica distintiva y recurrente que redefine e identifica el estilo Valentino actual, combinando la Roma clásica con la rebeldía de la cultura underground".

Las paredes enteras están cubiertas con los icónicos tacones altos con tachuelas, suecos y sandalias de la casa, colocados frente a paredes de paneles múltiples con espejos plateados e imágenes de palacios renacentistas tachonados en Roma.

“Hace 10 años tuvimos por primera vez las ideas del punk para crear una ruptura muy importante en los códigos de la casa. Y ahora en las reglas del romance que están viendo hoy. Nuestros zapatos pueden verse como punk, pero también se ven tachuelas de rock en cualquier puerta romana. Y Valentino es la única casa de alta costura romana”, sonríe Piccioli, de 53 años, cuyo estilo romántico moderno ha sido enormemente influyente en la moda durante la última media década.

La idea es organizar una gira con una variante de esta celebración de la marca, comisariada por Mariuccia Casadio y Jacopo Bedussi, aunque aún no ha decidido la próxima ubicación. La exposición marca el primer gran evento de Valentino en Shanghái desde su épico desfile realizado en una antigua estación de cruceros en el río Huangpu, que coincidió con la inauguración de una tienda insignia de 700 metros cuadrados en el centro de la ciudad.

China sigue siendo un mercado vital para Valentino, que hace un año abrió otra tienda insignia en China, en el distrito hipster de Sanlitun en Pekín. Sin embargo, después de varios años de rápido crecimiento, el negocio de la marca a nivel internacional ha sido lento. La facturación en 2019 registró un débil aumento del 2,4 % hasta los 1223 millones de euros, lo que provocó la salida del antiguo director ejecutivo Stefano Sassi y su reemplazo por Jacopo Venturini en junio.

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