Medellín (Colombia) - Colombia está en mora de tener mecanismos eficaces para luchar decididamente contra el contrabando que afecta a sectores como el textil y de confecciones, según expertos que participaron en la inauguración de la versión 26 de la feria Colombiatex.

Para el presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI), Bruce Mac Master, el Gobierno ha tomado medidas para contrarrestar el efecto de ese problema, pero todavía hay mucho camino por recorrer.

"Colombia tiene como sociedad que tomar la decisión de combatir y entender los efectos de este problema" que, además, "lo están utilizando para el lavado de activos", sostuvo el directivo en la apertura de la feria que se celebrará hasta el próximo jueves en la ciudad colombiana de Medellín.

Según Mac Master, "urge tomar cartas en el asunto para detener el enorme flujo de dinero que se está lavando a través del contrabando", sin precisar el monto.

Por ello, aseguró, "los colombianos agradeceríamos que se eliminen las subfacturaciones y que el Gobierno dote de herramientas a la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales y a los actores que están atacando ese delito".

La razón de tal solicitud "es que estamos frente a una industria que genera más de 460.000 empleos directos y de calidad, y que además representa el 0,8 % del PIB del país y el 7,5 % del PIB manufacturero".

Precisamente, la viceministra de Desarrollo Empresarial y ministra encargada de Comercio, Industria y Turismo, María del Mar Palau, ratificó el anuncio que hizo ayer el presidente Juan Manuel Santos sobre la prórroga del decreto 074 de 2013.

Ese decreto busca proteger de la competencia desleal a los confeccionistas y a la industria del calzado al aumentar la tarifa arancelaria de las prendas terminadas provenientes de países con quienes Colombia no tiene Tratados de Libre Comercio (TLC).

Sin embargo, explicó Palau, "el dolor que causa el contrabando a la industria colombiana no se resuelve con el decreto 074 del año 2013, que trajo muchos aspectos positivos pero también afectó a gran parte del comercio formal, por lo que haremos algunos cambios".

Así, el decreto establecerá un umbral de 10 dólares por kilo en lo relacionado con la importación de confecciones.

De esta manera, quienes estén por debajo de esta cuota deberán pagar 5 dólares y los que estén por encima 3 dólares.

Con ello, sostuvo la viceministra, se seguirá atacando a los precios artificialmente bajos".